Hablemos de sexo (sexo en solitario, sexo en pareja, sexo con varias parejas e incluso sexo digital) y de las formas en que algunas formas de comportamiento sexual y tipos de parejas siguen siendo privilegiados sobre otros, incluso por parte de los futuristas que opinan sobre el sexo con IA.
Tracy Follows, entrevistada en El País y autora de Future of You, se describe a sí misma como una “’pensadora verdaderamente original’, ‘una visionaria’ y ‘terriblemente precisa’ en sus predicciones» y Forbes la ha llamado «una de las mejores 50 mujeres futuristas en el mundo”.
Si bien no estoy discutiendo nada de esto, quiero demostrar cómo la experiencia en un área (futurismo) no necesariamente otorga experiencia en otra (comportamiento sexual humano).
Los expertos (y el público) a veces olvidan esto. Como resultado, los pronunciamientos menos expertos o los sesgos implícitos pueden quedar sin respuesta.
Ejemplos de negatividad sexual
En la entrevista, Follows dijo: “Una novia IA estará tan perfectamente programada para complacer a su dueño que, al final, los dos se convertirán en uno. En ese momento deja de ser interesante y, además, deja de ser una relación y se parece más a una masturbación. Éste es uno de los riesgos”.
Combinar la “programación perfecta” de una pareja de IA con la masturbación y luego calificar el placer personal como poco interesante, riesgoso y “no es una relación” podría demostrar varias suposiciones negativas para el sexo. También descarta como sexo de pareja a quienes experimentan relaciones sexuales con una compañera artificial, incluida la IA.
Hay otros ejemplos en la entrevista de El País. Por ejemplo, aunque con razón está preocupado por los prejuicios de los propietarios de las empresas de inteligencia artificial y cómo podrían afectar a los usuarios, Follows dice: “Imagínense que programen socialmente el uso hacia la homosexualidad en lugar de la heterosexualidad, o hacia tríos en lugar de parejas. Entonces podrías terminar con una serie de deseos que nunca pensaste que fueran parte de ti, pero que han sido programados en ti mediante manipulación mental”.
Es difícil entender por qué Fellows decidió utilizar estos ejemplos en particular. ¿Se utilizan para generar impacto en un contexto presumiblemente heteronormativo? ¿Se supone que estos ejemplos de homosexualidad y múltiples parejas dan miedo? En cualquier caso, demuestra la necesidad de ser conscientes también de los prejuicios de los expertos.
Follows tampoco explica cómo las empresas de inteligencia artificial, cuyo negocio es desarrollar, programar y entrenar bots, también programarían al usuario humano. Este es otro aspecto del comentario que vincula el sexo con el miedo.
¿Placer contraproducente?
Se podría argumentar que el entrevistador también demostró cierta parcialidad, al decir en un momento que «presionar un botón y tener un orgasmo en 10 segundos podría ser contraproducente».
Antes de asentir con la cabeza, detengámonos y preguntémonos ¿qué tiene el placer rápido que en realidad podría considerarse “contraproducente”? El placer, rápido o lento, es placer y punto. También es el objetivo detrás de la sextech.
No es del todo malo
Tengo algunas cosas buenas, aunque generales, que decir sobre sextech: “Algunos productos y servicios de sextech se centran en abordar problemas como la disfunción eréctil, la baja libido o la recuperación de un trauma sexual a través de programas guiados y apoyo. También existen aplicaciones y dispositivos que promueven la relajación y pueden mejorar la vida sexual de una persona al crear un entorno más propicio para la intimidad. La realidad virtual y la realidad aumentada pueden proporcionar formas nuevas y emocionantes para que las personas y las parejas exploren sus fantasías y participen en escenarios de juegos de roles, agregando variedad y emoción a sus vidas sexuales”.
Follows también predijo que “la IA nos hará adoptar conceptos psicosexuales completamente nuevos y emergentes de los que aún no hemos oído hablar ni hemos llegado a un acuerdo”.
Esta es una predicción bastante segura, dado que ya están surgiendo nuevos conceptos psicosexuales y esos mismos conceptos (como la legitimidad de las relaciones íntimas con compañeros de IA) podrían estar entre los presagios de un futuro mucho más informado y positivo en materia de sexo y placer, en el que Se reconoce y respeta todo el espectro del comportamiento sexual (y asexual) humano consensuado.
¿Hay un sexólogo en la casa futurista?
Como sexólogo que tiene un dedo pulsante en el clítoris del mañana, defiendo firmemente la inclusión de sexólogos, terapeutas sexuales y educadores sexuales en foros y debates futuristas sobre tecnología sexual e intimidad con IA.
Así como muchos de mis colegas podrían beneficiarse al aprender más sobre la intimidad entre humanos y la IA y las relaciones con otros tipos de compañeros artificiales, los futuristas como Tracy Follows podrían aprender más sobre ese ancho de banda del comportamiento sexual mencionado anteriormente.
Si personas de diversas disciplinas y estilos de vida pueden aprender unos de otros y compartir conocimientos mientras imaginamos los mundos del mañana, seremos mucho mejores. Y esto podría hacer más plausible un futuro inclusivo.
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