Se ha lanzado un juego en línea que imita a OnlyFans, diseñado para guiar a los trabajadores del sexo a través de las posibles trampas de seguridad y limitación de ingresos que supone el uso de plataformas de alojamiento de contenidos.
OnlyBans fue creado por un equipo de trabajadores del sexo frustrados por las limitaciones y reglas que muchas plataformas online imponen a los contenidos que alojan. En el juego, el jugador intenta ganar 200 dólares (totalmente virtuales) en seis semanas promocionando sus contenidos subidos de tono en la plataforma de juegos OnlyFans, con los problemas de las trabajadoras del sexo de la vida real puestos de manifiesto en el viaje.
El juego se basa en la investigación de Hacking//Hustling, un colectivo de trabajadoras del sexo y aliadas de las trabajadoras del sexo formado para abordar la violencia facilitada por la tecnología.
Los creadores del juego afirman que OnlyBans «examina críticamente la vigilancia de los cuerpos marginados y el trabajo sexual para enseñar con empatía a la gente la discriminación a la que se enfrentan los trabajadores del sexo en línea». Entre los temas que destaca el juego están los algoritmos de moderación de contenidos, el shadowbanning, las políticas de «nombre real» y el software de reconocimiento facial.
Aunque es básico, el juego hace un buen trabajo al reflejar la apariencia de OnlyFans y se apresura a plantear los problemas de las trabajadoras del sexo mientras el jugador navega por su viaje de promoción de contenidos. Se muestran ejemplos de fotos reales que supuestamente han sido baneadas en la sombra (no necesariamente en OnlyFans), y se dan consejos para ayudar a la gente a entender qué tipo de imagen tiene menos probabilidades de ser baneada.
El juego es una respuesta a las medidas cada vez más restrictivas que se están introduciendo en los sitios web y plataformas que utilizan los trabajadores del sexo para ganarse la vida. La legislación estadounidense sobre contenidos pornográficos en línea se ha endurecido en los últimos años, obligando a los sitios a aplicar procesos de verificación más estrictos que pueden causar problemas a los trabajadores del sexo legítimos que intentan promocionarse en línea.
Compañías financieras como Mastercard y Visa han dejado de trabajar con algunos sitios de pornografía, y han exigido a los bancos con los que trabajan unas normas de verificación y consentimiento igualmente más estrictas, lo que podría restringir aún más la capacidad de ingresos de muchos trabajadores del sexo.
OnlyFans permite el contenido explícito en su plataforma, a pesar de haber anunciado en el 2021 que dicho contenido sería prohibido, para luego anular rápidamente el cambio de política. Redes sociales como Facebook e Instagram no permiten el desnudo integral o el contenido explícito en sus plataformas, aunque Twitter sí lo permite.
La trabajadora sexual Lena Chen, que ha trabajado en OnlyBans, declaró a Hyperallergic: «Me inspiré en la creación de OnlyBans a raíz de mis propias experiencias como artista y trabajadora del sexo. Me he enfrentado a una censura continua, incluso respetando cuidadosamente los acuerdos de términos de servicio de Facebook e Instagram».
«OnlyBans ha sido un proyecto increíblemente personal y político», añadió Chen.
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