Proporcionar un ámbito dedicado al contenido para adultos en el Metaverso podría ampliar la audiencia de Meta. Pero si el metaverso domina las interacciones en línea, ¿podremos adaptarnos a él como al porno de realidad virtual?
Desde que Second Life apareció en escena en el 2003, los mundos virtuales se han convertido en un conocido patio de recreo, con rincones desde el principio reservados para contenido para adultos. Pero, como ocurre con cualquier gran aventura, conlleva sus riesgos, en particular la explotación y la discriminación. Meta, con su mirada escrutadora, bien podría verse tentado a sacar el hacha. Podría prohibir cualquier cosa que vaya más allá de los límites del decoro.
Hoy en día, Second Life sigue aquí, orgullosa y fuerte, con más de 900.000 usuarios. Ha servido de musa para otros espacios online que abogan por la libertad de interacción. Lugares como VRChat, que debutó en 2014, ya han explorado todas las facetas del metaverso adulto.
Hacia la regulación del contenido para adultos en el metaverso
Meta, por su parte, quiere acabar con el acoso y los ataques, incluso virtuales, en su metaverso. ¿Es este el fin de los juegos consentidos entre adultos en el rincón oscuro de la realidad virtual? Y con la industria del porno en realidad virtual ya llamando la atención y más, ¿seguirá siendo tan popular el “metasexo”?
Meta reina suprema, eso está claro. Incluso si otros quieren tomar atajos, como Viverse de HTC o las travesuras de Microsoft con Activision Blizzard, ¿podrán realmente sacudir al gigante que ha vendido más de 12 millones de unidades de sus auriculares de realidad virtual?
Entonces, ¿qué nos depara el futuro? ¿Cuándo será el metasexo una realidad? ¿Alguna vez el metaverso estará abierto al contenido para adultos? Con la evolución de la tecnología háptica, podemos esperar experiencias muy reales. ¡Quizás incluso demasiado para algunos! Pero habrá que tener paciencia. El futuro del metaverso es como una página en blanco esperando a ser escrita.
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