Todas las industrias del mundo están sujetas a los cambios que traen consigo el desarrollo y la tecnología, por lo que la industria del entretenimiento para adultos no es una excepción a esta regla. A veces habrá cambios y rebotes más grandes, pero otras veces serán lentos, que ni siquiera notaremos al principio.
En cuanto a la tecnología, podemos esperar literalmente de todo, desde experiencias de la realidad virtual hasta hologramas y simulaciones en las que nos sentiremos parte de ellas. Estos son grandes pasos, pero mientras tanto, se están dando otros más pequeños. Por ejemplo, algunas producciones porno ya están haciendo un trabajo socialmente útil, ayudando a grupos críticos de personas o cuidando el medio ambiente. Sus ingresos son elevados, así que es realmente noble lo que hacen, aunque rara vez se espera algo así (al menos si creemos lo que dicen los conservadores).
A veces, para acceder a un sitio web de este tipo, era necesario conocer la dirección exacta. Ahora, puedes encontrar fácilmente los agregadores disponibles en línea, y acceder a los contenidos que se ajustan a tus intereses personales. Esta es una pequeña, pero muy importante ventaja de la tecnología cuando se trata de sectores como éste.
Por supuesto, todo lo que nos rodea evoluciona, así que no podemos esperar que la industria del porno se estanque. Se están introduciendo formas modernas de pagar por los contenidos premium y de consumirlos. Un fenómeno interesante es la introducción de la tecnología blockchain en varios sectores de la industria, como el pago, la comunicación y el intercambio de contenidos.
Ajustando las cosas a nuestro gusto
La popular plataforma OnlyFans no fue concebida como un lugar para compartir contenidos para adultos con los suscriptores, ni Twitter como una red que proporcionara gifs con dichos contenidos que pudieran distribuirse libremente. De hecho, la distribución legal de contenidos eróticos que tienen más estética que pornografía es socialmente aceptable.
Algunas plataformas tienen normas muy estrictas en cuanto a desnudos y estética sexual, pero por eso hay webs especializadas donde podemos verlo todo, gratis o de pago. Tener sitios web separados es un gran paso adelante, ya que todos ellos pueden ofrecer servicios premium a sus usuarios más fieles.
La industria para adultos también se dirige a otro tipo de contenidos
Cada vez se oye más que estas empresas se reorientan hacia el tipo de contenido educativo y el trabajo socialmente útil. La educación sexual es uno de los beneficios que se pueden obtener de ciertos servicios, y sabemos de aquellos que invierten mucho dinero en promover este tipo de educación. Hace unos años esto era impensable porque en el estado de ánimo de la gente estaba grabado que la industria del porno es mala y perjudicial. Sin embargo, con el tiempo hemos aprendido a reconocer los matices, así como la justa distribución de estos contenidos, por lo que se ha convertido en algo aceptable que estos servicios aboguen por la educación sexual integral, la protección de los grupos más vulnerables y el compromiso de aquellos que aún no se han dado cuenta de su sexualidad.
Así que la próxima vez que veas un contenido patrocinado o esponsorizado por un nombre conocido en la industria para adultos, no juzgues antes de tiempo. Es muy probable que te equivoques y te pierdas de formar parte de un movimiento o de entender la esencia de su trabajo.
Los usuarios pueden convertirse en creadores
Hoy en día, el usuario medio con un smartphone en la mano puede crear contenidos virales sin necesidad de utilizar software especializado. La industria para adultos puede inspirar, hacer que los usuarios sean creativos y motivarlos a crear contenidos por sí mismos, ya sean para adultos o no.
Los usuarios están seguros y protegidos
Un sitio porno siempre ha estado asociado a una serie de virus y malware que se instalan cada vez que abrimos un contenido. Ya está en el pasado lejano, por lo que hoy en día incluso los anuncios no son tan aburridos, porque los usuarios deciden pagar por utilizar los servicios. Es muy importante que las empresas escuchen la voz de sus clientes porque sólo así podrán hacer un cambio significativo y todos podrán estar protegidos.
Se reducen las posibilidades de acoso
La cultura está creciendo a un nivel más alto del que hemos estado acostumbrados durante mucho tiempo, por lo que se puede decir que las posibilidades de que alguien sea acosado se reducen, especialmente si se trata de canales en los que se comunican directamente con los clientes o tienen streaming en directo. El acoso es un problema grande y común en el mundo, especialmente cuando se da en un contexto pornográfico o reivindicativo. Por eso es importante que cada una de las partes esté lo más protegida posible, y los servicios actuales afrontan ese reto con mucho éxito.
Hablar abiertamente de lo que queremos
La gente se avergüenza de los estigmas y prejuicios impuestos cuando se trata de la sexualidad. Pero a medida que pasa el tiempo, resulta cada vez más evidente que esos hábitos quedan en el pasado. De hecho, tal vez esto no dependa de la tecnología o del desarrollo de la industria, sino de la concienciación, la apertura y la trascendencia de las normas sociológicas impuestas, que no son lógicas, pero se aceptan como inmutables.
Las mujeres se interesan cada vez más por los contenidos para adultos
La superación de otra barrera social que se impuso a las mujeres, y es que el contenido porno está destinado sólo a los hombres. Afirmar tal cosa hoy en día es ridículo porque la sexualidad es mucho más que una relación entre dos personas. Incluye muchos aspectos, y las restricciones nunca han traído ni traerán nada bueno para las personas. Las normas sociales no deben convertirse en algo privado.
Conclusión sobre la industria del porno
La industria de los adultos, tal como la conocemos hoy, no seguirá siendo así. Habrá muchos cambios, muchas innovaciones, pero también ajustes a los antiguos, así como su mejora. Las cosas nunca son tan sencillas como parecen, por lo que hay que trabajar mucho para que sean lo que el público busca. En cierto modo, incluso los sitios porno ya no se dedican estrictamente a eso, y las producciones se dedican a la labor social.
Nos corresponde luchar contra los prejuicios y, por supuesto, respetar esa opción que es diametralmente diferente a la nuestra, porque las diferencias hacen que el mundo sea hermoso.
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