Opciones. Tenemos muchas a la hora de consumir información. Ya no se limita a los medios tradicionales de consumo, sino que ha ido más allá y provoca a nuestros sentidos a nuevas alturas.
Desde el metaverso hasta la realidad virtual, la información se condensa en un smorgasbord sensorial para nuestro mayor disfrute.
La VR, antes tema de las películas de ciencia ficción, se está convirtiendo en la nueva frontera de la tecnología, y ya ha dejado su mayor huella en el porno.
Se espera que los ingresos mundiales del sector, aunque sean de nicho, alcancen los 19.000 millones de dólares en el 2026, según Juniper Research.
Grandes marcas como Pornhub ya están haciendo caja, con una media de medio millón de visualizaciones al día de los 3.000 vídeos gratuitos de VR que ofrece.
¿Qué es exactamente el porno en realidad virtual?
Bueno, en primer lugar, promete «transformar a los usuarios de observadores pasivos de fantasías sexuales en pantallas en participantes activos en experiencias eróticas inmersivas», escribe Mark Hay de Mashable.
«Especialmente en el último año, cuando la pandemia nos ha mantenido a la mayoría de nosotros confinados en casa, la perspectiva de atarse unas gafas y deslizarse hacia una escapada orgiástica de nuestro aislamiento y frustración ha atraído a más usuarios potenciales hacia la tecnología», observa Hay.
Durante muchos años, el equipo para una experiencia completamente inmersiva era costoso e inalcanzable. Ahora que la VR se ha generalizado, los contenidos son más accesibles.
«El porno en realidad virtual se está volviendo muy popular en Estados Unidos y Japón», dice Joanna Watkins, propietaria de la tienda de juguetes para adultos Lizzy Bliss.
Sobre si es una opción viable en Sudáfrica, Watkins dice que sí y que no.
«No nos falta la electrónica ni las plataformas. Hay opciones de streaming de VR, tanto de pago como gratuitas, y puedes volverte loco con los vídeos gratuitos en sitios como Pornhub y Xhamster», añade.
Pero al igual que la observación de Hay, también dice que todo se reduce al equipo.
«La gafa de VR más popular y barato que se utiliza en Estados Unidos es el Oculus 2, de 299 dólares, que es asequible en Estados Unidos, pero en Sudáfrica, te enfrentas a un precio de 10.000 dólares si tienes suerte».
«Pero, si un poco de pixelación no te molesta, puedes conseguir una gafa de la realidad virtual que se adapte a tu teléfono», sugiere Watkins.
Watkins también plantea la cuestión de la adaptabilidad y de «qué pensarán los vecinos».
«Es tu vida privada, no debería importarte lo que piensen los demás, para empezar. Sin embargo, hay que tener en cuenta lo que va a suponer para tu relación y si el porno de VR influye positiva o negativamente en la misma», dice Watkins.
La autora británica y experta en relaciones de pareja Tracey Cox establece una comparación: «Pagar a una chica de cámara para que haga cosas específicamente para ti -sin el permiso de tu pareja- definitivamente lo lleva a un territorio peligroso para la mayoría de la gente», escribe para el Daily Mail.
«El porno en realidad virtual lleva las cosas a un nivel aún más amenazante», dice Cox.
«Psicológicamente, la VR no es muy diferente al porno normal y a la fantasía asociada o al placer que conlleva. Es una cuestión de si estás abierto a ver porno en tu relación y si incluyes a tu pareja en esa decisión», reitera Watkins.
Hay momentos en los que las líneas pueden ser borrosas. Si tienes dinero para quemar, puedes personalizar un avatar para que se vea exactamente como quieres, como un ex que nunca superaste o alguien que deseas, pero que está fuera de los límites.
«Algunos hombres piden avatares de su novia o esposa porque así pueden hacerles hacer algo que no harían en la vida real», advierte Cox, que alude a otra forma de porno de venganza.
Hay un lado positivo, en realidad muchos beneficios del porno en 3D.
«El porno en realidad virtual puede ser una gran actividad de pareja y puede condimentar mucho los juegos de rol. ¿Qué hay mejor que combinar fantasía y realidad? Puedes mezclar una experiencia sexual de VR con el placer sexual real.
«El porno en realidad virtual, en mi opinión, es una forma estupenda de evadirse y explorar la sexualidad en solitario o en pareja. Si eres abierto al respecto y te comunicas, puede ser tan inocente como excitante», dice Watkins.
Los terapeutas y educadores sexuales también esperan que la nueva tecnología ayude a las parejas que tienen problemas en el dormitorio. Podría ser un impulso muy necesario para las parejas que mantienen relaciones a larga distancia.
Las posibilidades son infinitas, sólo hay que recordar que hay que jugar con responsabilidad.
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