El deseo de sexo casual puede predecir un menor interés en los robots sexuales

¿El deseo de tener sexo casual significa que un amante robótico nunca entrará en tu cama?

Según los resultados de mi investigación sobre el deseo por los robots, lo más probable es que alguien que busca múltiples parejas sexuales casuales no esté fantaseando con robots sexuales.

A primera vista, el hallazgo también podría interpretarse fácilmente en el sentido de que respalda los estereotipos sobre por qué la gente desea robots. Sin embargo, tras un examen más detenido, sostengo que este hallazgo respalda la idea de que las personas pueden estar interesadas en los robots sexuales por razones distintas al sexo casual.

Por el amor y el deseo de los robots

En los últimos artículos, he discutido los hallazgos de mi tesis que examina las diferencias individuales en el deseo de intimidad con los robots. En un artículo, hablé de cómo el sexismo hostil es una de las razones por las que los hombres podrían estar interesados en tener relaciones sexuales con robots. En otro artículo, me centré en la necesidad de diversidad en el desarrollo de robots sexuales para que puedan atraer a una mayor variedad de personas. Y, por último, hablé del hallazgo de que los hombres están más interesados en el sexo con robots, mientras que las mujeres están más interesadas en la amistad con robots.

En este artículo, compartiré mis hallazgos cuando medí el deseo de una persona por los robots junto con su orientación sociosexual (SOI).

¿Qué es la orientación sociosexual (SOI)?

En términos más simples, la orientación sociosexual (SOI) es la probabilidad de que una persona tenga o desee tener relaciones sexuales casuales con otra persona. SOI también examina las creencias de alguien sobre el sexo casual, como su acuerdo con la afirmación «el sexo sin amor está bien».

Para determinar el SOI de un participante, el equipo preguntó a los participantes sobre su participación en sexo casual durante el último año, si pensaban que el sexo casual es algo que les interesaría (por ejemplo, «el sexo sin amor está bien»), y si han tenido algún deseo de tener relaciones sexuales casuales con un amigo o un extraño durante la última semana, dos semanas o el mes anterior.

En mi tesis, descubrí que, tanto para hombres como para mujeres (en una muestra de estudiantes universitarios de una universidad del noroeste del Pacífico), un SOI más alto (más interés en el sexo casual) predecía un menor interés en el sexo con un robot. Dicho de otra manera, en una medida que combinaba el comportamiento, la actitud y el deseo de los individuos hacia el sexo casual con otras personas, las puntuaciones más altas predecían un menor interés en los robots.

Sexo casual y robots

La respuesta más obvia es que las personas que tienen sexo más casual pueden estar menos interesadas en los robots sexuales. Esto también sugiere que las personas que tienen menos sexo casual pueden estar más interesadas en los robots sexuales. Si bien esto podría encajar con una serie de nociones preconcebidas sobre quién está interesado en los robots sexuales, hay muchos matices que vale la pena explicar.

En primer lugar, tener sexo casual es sólo una de las tres facetas de SOI, y las otras dos se relacionan con el deseo de sexo casual.

Un SOI más alto es posible si alguien informa que tiene relaciones sexuales frecuentes mientras odia el sexo casual como concepto y no tiene ningún deseo por ello. Sin embargo, las personas con un SOI más alto pueden considerarse personas más centradas en el sexo en comparación con aquellas con un SOI más bajo.

Si alguien quiere mucho sexo casual y no ha tenido ninguna pareja en el último año, aún podría tener puntuaciones SOI relativamente altas.

Y, para aclarar algunos de estos hallazgos, si bien se pueden realizar análisis de las facetas por separado, a menudo no es un uso válido de la medida sacar conclusiones de las facetas individualmente.

Lo que sugiere este hallazgo es que las personas podrían estar interesadas en los robots sexuales por motivos distintos al sexo casual.

Cuando alguien gasta dinero en un robot sexual, el comprador puede considerarlo un compromiso, y ese compromiso puede, en cambio, parecerse a una relación más que a un sexo casual. Sostengo que, en lugar de la noción obvia de que “los amantes de los robots sexuales no tienen sexo”, las personas que usan robots sexuales pueden no estar interesadas en absoluto en el sexo casual y, en cambio, pueden querer una relación.

Esto crea una dirección futura para esta investigación, que podría examinar cuánto desean los participantes una relación comprometida en comparación con el sexo, y si esa creencia se relaciona con el interés en un robot para el sexo y/o las relaciones.

Aunque no hay un cronograma inmediato para esta investigación, se puede respaldar manteniéndose en contacto con nosotros en Future of Sex y apoyando conferencias como el Congreso anual sobre Amor y Sexo con Robots.

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